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El verano es un buen momento para empezar a concienciarnos sobre el ahorro de energía. Deberíamos de empezar analizar profundamente nuestras rutinas diarias, uso prudente de la luz eléctrica  y sobre todo con el aire acondicionado. Así que desde nuestro blog queremos explicarles una serie de consejos para ahorrar energía en verano.

  • Aprovechar la luz solar

Como todas sabemos en verano podemos disfrutar de más horas de sol, por lo que deberíamos de aprovechar más la luz solar y apagar las luces de casa que no sean necesarias.

  • Desconectar electrodomésticos en vacaciones

Algunos electrodomésticos como la nevera, son de los que más encarecen la factura de la luz. En vacaciones , cuando no vas a estar en casa durante un período prolongados de días, lo más aconsejable será desenchufarla.

  • Equipo solar térmico

Cuando aprieta el calor… ¿Por qué  no aprovecharlo para calentar el agua de la ducha? Es lo que consiguen los famosos equipos solares térmicos que proporcionan como mínimo entre el 30% y el 70% de la energía necesaria para calentar el agua, ya sea de la piscina, la ducha, etcétera. dependiendo del modelo, la marca, la instalación y las condiciones específicas de cada vivienda.

  • Comprobar que todo está bien cerrado

Si ponemos el aire acondicionado con alguna ventana o puerta abierta, aumentaremos considerablemente el gasto de luz y estaremos desperdiciando el frío generado.

  • Colocar un termostato

La temperatura interior de casa no debe bajar de 22°. Un termostato nos permitirá controlarla mejor y, por tanto, ahorrar, porque cada grado extra incrementa el consumo un 8 %.

  • Limpiar bien las consolas de aire y ventiladores

Cuando estos aparatos se llenan de polvo, se obstruyen, por lo que consumen el doble y pueden averiarse. Para que no pase, hay que limpiar periódicamente los filtros del aire y realizar revisiones periódicas de los sistemas de refrigeración; evitaremos averías y gastaremos menos.

  • Revisar las bombillas

Las bombillas y los flexos suponen un 4,1 % del consumo total de casa. Cambiarlas por las de bajo consumo o LED supone reducir el gasto energético en un 80 %. Además, aunque son más caras, duran 10 veces más que las bombillas tradicionales.

Aprende y disfruta